Algunas palabras son como algunas parejas: parece que no pegan nada, hasta que las ves juntas. Y entonces piensas: ¡claro que sí!
"¿Consumo artesanal?" El concepto llegaba de la mano de Lucía Cordeiro, Directora Ejecutiva de ACME, la Asociación de Creadores de Moda Española, constituida en 1998 que en la actualidad cuenta con la participación de 35 marcas de diseño de moda.
Lucía habló sobre la marca "España" y el papel de la Asociación en la promoción de la moda más allá de nuestras fronteras. La directora ejecutiva de ACME explicó que, en estos momentos, la marca "España" no tiene una identidad con unos atributos bien definidos.
"Si pensamos en otros países, Francia se ha posicionado en torno al lujo, Italia como el pret-a-porter y la moda de calidad, EEUU como los grandes medios de comunicación y España como Prontomoda y conceptos de negocio -Inditex, Mango- unidos a la pronto moda y la moda nupcial".
Fue la semana pasada, en el marco del seminario CO+MO 011 organizado por FCom Navarra. Lucía comenzó su intervención hablando de la diferencia entre imagen y apariencia, el mundo de la copia y el consumo de marcas de lujo:
"Hemos confundido apariencia con imagen". La imagen es positiva, la apariencia es negativa. La imagen es importante: habla de nosotros y siempre podemos crear más de una imagen de nosotros mismos. Mientras que la apariencia es falsa, y en cierto modo, es preocupante".
Y refiriéndose a las falsificaciones, preguntaba:
"¿Qué nos lleva a querer aparentar lo que no somos?"
Casi al final de su presentación, Lucía habló de la defensa de la artesanía como último bastión que nos queda en España:
"La artesanía no es sólo manual. Hay artesanía en la creación, la hay en la producción, y también en el consumo".
¿... En el consumo?
"Sí, mimando los productos que consumimos. Conociendo los materiales y la autoría que hay detrás de cualquier producto. Ya lo hacemos en sectores como la gastronomía. ¿Por qué en moda nos dejamos llevar por la tendencia del precio-precio-precio? Hemos de comprar menos pero comprar mejor. Acabar con esa compra bulímica que no necesitamos a nivel físico y psíquico, y empezar a consumir selectivamente".
Me encanta el concepto de "Consumo Artesanal" frente al concepto de "Fast Fashion". Pero en estos momentos, pienso que practicar ese tipo de consumo algunas veces está vinculado a un poder adquisitivo medio (más bien alto). Es el eterno debate entre calidad y cantidad, aderezado por una realidad: nuestro ritmo frenético de consumo no es sostenible en el tiempo. ¿Tú qué opinas?
Buenas tardes, Belén!
ResponderEliminarme ha parecido muy interesante este tema, puesto que muchas veces pienso en él.
Como a todo en la vida le veo pros y contras y me sitúo en un lado para una cosa y en el otro para otra. Prudencia, quizá. Oportunismo.. no lo sé.
Es cierto que vivimos en una sociedad de consumo bulímico, me ha parecido una gran expresión. Vamos adquiriendo prendas de tendencia, nunca tenemos suficiente... Adoramos a estas vacas sagradas como Inditex o Mango...
Realmente estamos consumiendo una copia. Pero estamos manteniendo un ritmo que crea puestos de trabajo.
Por otra parte, hay gente que no puede permitirse muchas cosas y sí si las compra en grandes cadenas como las mencionadas. ¿También tienen derecho a vestir bien más barato, no?
Y luego la otra cara. Muchas veces, lo aplico sobre todo a calzado, vale más la pena comprar un buen producto caro que varios malos. ¿Pero todo el mundo puede gastarse 130 euros en unas botas de piel con buena suela y forro de piel?
Las dos caras de una moneda.
Creo que lo bueno es que el mercado y el mundo están tan diversificados que podemos acceder a la opción que más nos plazca. Y ya cada uno que haga lo que quiera.
Un saludo fuerte!!
Cuantas frases certeras y punteria a la esencia del fenómeno!
ResponderEliminarJusto hoy me comentaba un amigo alemán ante mis lamentos, "es que habéis vivido MUY bien, desde aquí solo se podía admirar y uno no podía evitar preguntarse, como lo hacen? Cómo financiar un estilo de vida tan a por todas?"
Veo que en general se prefiere un producto menos bueno/duradero y renovar con regularidad. Es menos un tema económico (porque lo bueno envejece con dignidad, dura más) que de concienciación social.
Te interesará porque creo que eres de esta filosofía.CONSULTORÍA ARTESANAL....Arte... eso es lo que haces.
ResponderEliminarQué interesante Belén. Buen resumen de las ponencias que tuvimos. Te hubiera encantado ayer Loewe, habló de cosas muy relacionadas. Te contaré.
ResponderEliminarCris Sánchez Blanco.
Raquel, mil gracias por tu comentario. ¿Y si esas grandes marcas como Inditex o Mango apostaran también por el consumo artesano? Lograría cerrarse el círculo de la moda democrática. Les veo cada vez más alejados de la copia, y más cercanos al diseño propio. ¡A ver!
ResponderEliminarIlona,
ResponderEliminarQué ilusión tu comentario. Ya sé que lo lees regularmente, pero tienes tanto que aportar,que me alegro de que entraras en la conversación...
Lo interesante de cambiar regularmente es que personas que consumen productos artesanales -o piezas únicas- muchas veces lo combinan con otras de Zara o H&M. triunfa el mix, pero nos sigue gustando cambiar a menudo...
Por lo de vivir bien... ¡eso siempre! Sólo que ahora buscando fórmulas nuevas, no vinculadas necesariamente con el gasto. ¿No? Nos vemos pronto....
botedeplumas,
ResponderEliminarHoy he descubierto que a delicado y dedicado sólo les separa una letra.
Va por ti. GRACIAS. SIEMPRE!!
Hola Cris,
ResponderEliminarQué bien tú por aquí... sé que lees siempre los posts, pero me encanta que los comentes también.
Me hubiera encantado escuchar a E. Loewe. ¿Me pasarás algunas notas de la conferencia si puedes? Un abrazo!
Por supuesto! Los pongo en orden y te envío. Además, pudimos estar más despacio nostras con él y es muy interesante.
ResponderEliminarBuen viernes.
Un abrazo, Cris.
Hola Belén,
ResponderEliminarAl hilo de tu pregunta sobre el "consumo artesanal", en el centro en el que trabajo, Surgenia (Centro Tecnológico Andaluz del Diseño), valoramos como oportunidad a un consumidor al que denominamos ARTESANOSUMER, el cual vemos que aparece en una época de austeridad y de vuelta a la racionalidad del gasto y para el que se despierta una búsqueda de aquellos valores más sencillos y auténticos de la mano del carácter tradicional y local de los productos. Los valores seguros vuelven a cobrar originalidad, y la afectividad, emoción y nostalgia resurgen frente al hedonismo.
Es cuando empresas con procesos de manufactura tradicionalmente artesanal vuelven a cobrar protagonismo y se alzan como ejemplos de estrategia de marca y diseño de producto, y se reconoce su valor.
Como dices, este tipo de consumo puede estar vinculado a un poder adquisitivo alto, pero sin embargo, nosotros vemos la oportunidad en distintos sectores como el habitat, moda, joyería o gastronomía, de una visión que auna la autenticidad de la creación por un artesano pero con un sistema industrial que permita obtener productos con un coste más moderado. Este enfoque, permite la conservación de técnicas e incluso permite su evolución, dado que a menudo, los objetos artesanales, caen en arquetipos obsoletos y muchas veces se orientan exclusivamente al turismo y no aportan diferenciación en diseño.
Sobre estos conceptos, intentamos articular en nuestro centro, investigaciones y proyectos que buscan innovar en el sector la creación de productos que revisan la tradición, desde el respeto por su historia, con el objetivo de materializarse en productos que actualicen los conceptos, formas o usos, y conecten con el consumidor actual.
Un saludo.
Fátima Sarmiento